Desconozco, cual habrá sido la reacción de Aminatu Haidar, ante la decisión del presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, dando unos derechos a Marruecos, que legalmente no tiene, pero me la imagino, aunque supongo que no podrá hacer pública su opinión.
Toda la prensa española, publicaba el 23 de marzo, del 2022, o bien la versión íntegra de la carta, o trozos de ella, en la que se hacía constar el cambio de posicionamiento, de España, ante el problema del Sáhara occidental, al monarca marroquí Mohamed VI. Estaba fechada el lunes 14 de marzo, cuatro días antes de que la Casa Real marroquí la hiciera pública parcialmente el viernes por la tarde, porque el Gobierno, la había ocultado.
“Tengo el honor de dirigirme a Vuestra Majestad para transmitiros algunas ideas importantes para la nueva relación entre los Reinos de Marruecos y España".
Y se posiciona con Marruecos, defendiendo el plan de autonomía sobre el Sáhara Occidental que planteó el reino alauita en 2007, como el más “serio, realista y creíble”, rompiendo así, España, su histórica neutralidad, hasta ahora alineada a las resoluciones de las Naciones Unidas sobre la autonomía, del último territorio sin descolonizar, en el continente africano. Mal momento elegido, porque Argelia es un aliado saharaui, y en estos momentos de crisis energética, adquiere una gran importancia, ya que es, un importante proveedor de gas, para Europa.
Y en este panorama, en el que ha sido protagonista el Sáhara, me ha venido a la mente, un gran personaje, que representa la resistencia pacífica de los saharauis, frente a la invasión marroquí. Una mujer, Aminatu Haidar.
El País Semanal del 9 de abril del 2021, se ocupaba de esta activista saharaui, Aminatu Haidar. Haidar en árabe significa, león. Algunos afirman que el nombre de una persona influye en su carácter, y sin duda, excepto que es pacifista, tiene toda la fortaleza de una leona, que le ha llevado a la admiración internacional, haciéndole acumular una gran cantidad de reconocimientos internacionales. Entre ellos, la nominación al Premio Nóbel de la Paz en el año 2008. Y que al no concedérselo, recibió en el 2019, el Premio Nóbel Alternativo.
Pero ¿quién es esta mujer, a la que en España se conoce tan poco, a pesar de tantos reconocimientos a su labor? A nivel mundial, es el rostro y símbolo de la resistencia saharaui frente a la ocupación marroquí del Sáhara Occidental. Esta mujer, de 55 años, que nació y vive en el Aaiún, es madre de dos hijos, y cursó estudios de literatura moderna, y que según las publicaciones, los saharauis opinan que: "Es una mujer valiente, que nos defiende y representa, y a la que tenemos mucho respeto", definiéndola como la paz hecha mujer."Su mirada transmite calma, a su lado no se puede sentir más que seguridad". Es el más prestigioso personaje, que lucha por la independencia del Sáhara Occidental.
Pero su activismo no es algo reciente. Ya con 20 años en 1987, la policía la secuestró en su casa de El Aaiún. Durante cuatro años la mantuvo desaparecida y sometida a torturas, por participar en la organización de una protesta pacífica con otros 700 participantes, que exigían el referéndum de independencia del Sáhara. Fue detenida y encarcelada sin cargos, ni juicio, en unas "cárceles secretas" y durante 4 años y sufrió torturas, junto a otras 9 mujeres y 50 hombres, saharauis. En 1991, al ser puesta en libertad, era incapaz de caminar, pero había sobrevivido y se reafirmó, en su deseo de luchar por la independencia del Pueblo Saharaui, frente a la ocupación de Marruecos.
No sería la única vez, En el 2005, durante la conocida como intifada saharaui, volvió de nuevo a sobrevivir, durante seis meses en la llamada Cárcel Negra de El Aaiún, donde mantuvo, con sus compañeros de encierro, una dura huelga de hambre.
"Es un milagro que siga con vida, porque soy una mujer agotada físicamente por tantos años de desaparición y encarcelamiento, tanta tortura y tantas vejaciones. Pero aquí estoy y seguiré luchando con todas mis fuerzas", decía tras su liberación, cuando las fotos mostrando un rostro "totalmente destrozado", dieron la vuelta al mundo, mostrando la dureza con la que fue tratada.
Y esta represión, no paró. El 13 de noviembre del 2009, aterrizaba, en el Aeropuerto Hassan I del Aaiún, procedente de Nueva York, fue detenida por la policía marroquí, durante 24 horas, y la expulsaron en un avión a Lanzarote. El 17 de diciembre, volvió a el Aaiún en un avión medicalizado, tras 32 días de huelga de hambre, en la que sólo tomaba agua y azúcar. Tuvo que ser el Presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, el que presionó al rey Mohamed VI, para que le devolviera el pasaporte. Mientras Haidar acusaba, al Gobierno español, de inhibirse en el asunto y actuar en connivencia con el Gobierno marroquí.
Y las cosas, pese a los esfuerzos de esta heroica mujer, parece que no han mejorado.
